El factor clave es la inflamación. Los patógenos son proporcionales a la inflamación, y al estado de la mucosa gástrica.
Creer que algunos microorganismos no tienen funciones específicas, de forma positiva, porque solo los hemos visto actuando de forma negativa, no es una visión íntegra y amable con nuestros pequeños amigos. No va a ser difícil generar que, nuestros microorganismos, se llenen de factores estresantes y reaccionen de forma negativa, como factores de virulencia, respuestas pro inflamatorias, interleuquinas 8 interviniendo, lo llamado isla de patogenicidad, cuando le permito un contexto inflamatorio, con una alimentación que posee gran carga de lacteos industriales, carnes con animales que han sido expuestos a grandes cargas de antibióticos, GMO, procesos digestivos altos y estresantes...
Nombremos uno;
Helicobacter Pylori. Qué hay detrás de esta bacteria con reacción negativa;
Cuando se encuentra en producción de estrés oxidativo, se aloja en la mucosa y la va degradando, hasta generar una atrofia gástrica. ¡Y ojalá no caigas en antibióticos y “protectores” gástricos como el omeoprazol.
Luego de esto, dejamos de producir el ácido clorhídrico, y claramente, genera una inflamación. La propia bacteria tiene sistemas enzimáticos que la protegen, adhesinas, entre otros mecanismos. Como la ureasa (amoniaco!). Y te digo más, el 60% de la población posee una gran proliferación de esta bacteria. Si vemos bien los síntomas, no es casual encontrarnos con ella.
¿Cómo reparo el ácido clorhídrico?
Dejando una ventana para sentir hambre, y hambre real. Comer frecuentemente es UN MITO, lo que te permite ser un factor contribuyente al desequilibrio de ph, además de ayudar a respetar el reloj biológico, y funcionamiento de los órganos en los tiempos que lleva el conocido ritmo circadiano.
✨Si tenemos un buen aporte de enzimas pancreáticas, favorecemos aún más; con orégano, peperina y paico. Son plantas que no solo son fáciles de conseguir, sino que van a revertir y mejorar todo lo nombrado acá.
✨Recuperamos tejido, recuperamos mucosa, y recuperamos células parietales.
Aceite de neem+ betaina HCL con pepsina como suplementos diarios y equilibradores.
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